Respondiendo a la invitación del primer encuentro provincial presencial realizado en Córdoba en 2023 («Vengan y verán…»), las Comunidades de los CECs transitaron un rico itinerario de aprendizaje abordando temáticas claves para acompañar mejor la vida de los niños, niñas, adolescentes y jóvenes y sus familias y así lo celebran y lo comparten.
En Córdoba, el año pasado, recibimos una invitación de inspiración bíblica ―“Vengan y verán”―, tal como Jesús les dijo a sus discípulos. Esta invitación consiste en aprender, desde la experiencia, para encontrar respuesta a nuestras preguntas y dar sentido a nuestras búsquedas. Por eso, durante el 2024, respondiendo a esa invitación, nos tomamos un tiempo para encontrarnos, hacer experiencia y aprender comunitariamente, a lo largo de tres encuentros en cuatro comunidades de aprendizaje que abordaron temáticas claves:
Crianza y Familia
- Límites
- Vínculo del Centro con la familia
- Acompañamiento pedagógico
ESI
- Vínculos sexoafectivos
- Cuidado integral
- Respeto a la Diversidad
Espiritualidad
- Espiritualidad y vulnerabilidad
- Espiritualidad en la cotidianidad como parte inherente de nuestra identidad desde una mirada pedagógica
- Espiritualidad atenta a los signos de los tiempos y a la coyuntura territorial de los barrios de los que somos parte, en diálogo con otras religiones.
Consumo Problemático
- Conceptos generales
- Prevención
- Estrategias de acompañamiento
El martes 26 de noviembre, nos encontramos para celebrar juntos y juntas la cosecha de todos esos aprendizajes. Fue un momento de compartir con otros/as lo que descubrimos en esta experiencia, así como lo hicieron los discípulos luego de compartir la vida con Jesús.
Las Comunidades de Aprendizajes de los CECs nos han permitido sistematizar y compartir experiencias educativas de cada territorio, reflexionar sobre ellas, mejorar los aprendizajes en nuestros Centros, y nutrir las experiencias locales con aportes teóricos oportunos y la experiencia compartida en comunidad. Hemos buscado generar vínculos entre equipos y fortalecer redes de cooperación, siempre con la premisa de que todos tenemos algo para aprender y ofrecer.
En este caminar nos inspiró el evangelio de Jn 1, 35-50, donde Jesús nos hace una invitación clara (“Vengan y verán”) y nos ofrece algunas pistas para reimaginar la práctica educativa y evangelizadora en los Centros Comunitarios de la Provincia Marista Cruz del Sur.
Creemos en un Dios que nos invita a abrazar nuestro barro. Nos reconocemos vulnerables y él nos invita a ofrecer lo que tenemos y a compartir la vida en comunidad.
Procuramos abrazar la pedagogía de Jesús, que siempre es un camino con el otro, un camino comunitario. Un camino en el que, como lo hacía Jesús, no solo buscamos entender sino que sea un aprendizaje encarnado, transformando la vida de quienes están implicados.
En conjunto con el Equipo de Evangelización de la Provincia, elaboramos el documento “VENGAN Y VERÁN. Una inspiración bíblica para los Centros Educativos Comunitarios Maristas”, que busca acompañar nuestra misión educativa e iluminar nuestras experiencias en cada uno de los territorios. Y, al concluir el encuentro evaluativo y celebrativo que pone fin a este año compartido, reafirmamos con convicción y alegría nuestra identidad y misión:
Los CECs de Cruz del Sur, como Maristas de Champagnat…
Nos reconocemos como una comunidad de hermanos y hermanas, personas valiosas que caminan juntas hacia un porvenir mejor, guiadas por los valores maristas.
Somos educadores y educadoras llevando adelante el sueño de Marcelino, trabajando desde el corazón de nuestras realidades, en defensa de los derechos de niños, niñas, adolescentes y jóvenes y de sus familias. Actuamos como agentes de transformación social, desde la afectividad y el compromiso territorial, siendo referentes creativos y potentes en las comunidades que habitamos.
Celebramos el intercambio y la riqueza de compartir la vida que crece, la alegría del encuentro y el caminar en comunidad. Celebramos todas las formas de resistencia ante los procesos de deshumanización, mientras seguimos sosteniendo nuestra misión de poner a los NNAyJ en el centro de nuestra tarea educativa y social.
Caminamos hacia un futuro lleno de esperanza, donde crecemos en comunidad y abrazamos las diferencias para construir juntos y juntas. Nos enriquecemos, como Familia, con valores compartidos, aprendizajes significativos y el deseo de mejorar nuestra tarea cada día.
Nos proyectamos hacia el encuentro con los otros y otras, compartiendo quiénes somos y lo que sabemos, construyendo una nueva forma de ser y hacer comunidad, fieles al sueño marista que nos guía.