El martes 28 de octubre, en el 60º aniversario de la Declaración Conciliar «Gravissimum Educationis», el Papa León XIV acaba de publicar “Dibujar nuevos mapas de esperanza”, su segunda Carta Apostólica, recordándonos que la educación es la forma concreta en que el Evangelio se hace educación, relación y cultura, reiterando la necesidad de la formación integral de la persona, irreductible a un algoritmo, y destacando el rol de la familia como principal educadora.
San Marcelino Champagnat
En el punto 2 de la Carta, el Papa subraya el papel de la Iglesia como «Madre y maestra» y, en este sentido, habla de la historia de la educación católica como historia de la acción del Espíritu.
En este proceso, recuerda que muchas congregaciones dieron los primeros pasos en el campo del saber “enriqueciendo de manera pedagógicamente innovadora y socialmente visionaria la educación” y entre los protagonistas de esta historia, menciona a San Marcelino Champagnat:
A principios del siglo XIX, también en Francia, San Marcelino Champagnat se dedicó «de lleno, en una época en la que el acceso a la educación era todavía privilegio de unos pocos, a la misión de educar y evangelizar a los niños y jóvenes, sobre todo a los más necesitados»(cf.Dilexi te n.70).”
En este enlace, se puede leer la nota de Vatican News sobre la publicación de la Carta Apostólica.
Por el momento, el documento solo está disponible en italiano.
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